ENSAYO SOBRE LA FELICIDAD

La felicidad, una utopía.

En El Pequeño Larousse Ilustrado de su edición del 2003 la palabra utopía se define como el sistema o el proyecto ideal pero que no se puede realizar. Pensar en una felicidad total es una utopía ya que cada día estamos expuestos a que cualquier cosa pase en nuestras vidas, o en las vidas de otros que consideremos importantes y por lo tanto llegue a afectarnos a nosotros también. La felicidad permanente no existe, no puede ser constante porque siempre van a existir factores que la interrumpen, desde la muerte de un ser querido hasta un noticiero del medio día, desde un fracaso o una resignación cotidiana hasta el problema de algún familiar; y es que éstas son situaciones diarias que no se pueden evitar y mucho menos parar; son imprescindibles,y no nos permiten que estemos felices todo el tiempo; por eso, la felicidad que llegue a existir en algún momento, con esa velocidad que viene; así, se puede ir.

Días pasados escuchaba a alguien decir que una investigación mundial había manifestado que Colombia era el país más feliz del mundo, y que el segundo era una isla en el caribe. No tengo seguridad de la veracidad de la información, pero si esto es así, me pregunto ¿Cuáles serían los factores que influyen en estos miles de colombianos para que se sientan felices?, ¿los crímenes atroces?, ¿los secuestros?, ¿la opresión?, ¿la esclavitud?, ¿el desempleo?, ¿la pobreza? y así podría seguir nombrando cientos de cosas que ocurren en este país donde vive “la gente mas feliz del Mundo”.O qué pensara la gente con recursos que no sufre nada de esto, sufrirán al menos los 10 minutos que dura la “parte importante del noticiero “y luego reirán con los goles 45 minutos mas, y mientras almuerzan y ven la interminable sección de entretenimiento se les olvidaran las 5 avalanchas del día, los 8 muertos de la masacre en tal vereda, la emergencia en pueblos con volcán propio…y hasta la cifra del día del dólar!

Pensándolo bien, cuando hicieron esa encuesta a lo mejor no nos habíamos enterado de la parapolítica, ni habían descubierto las fosas comunes, ni que iban a soltar a los guerrilleros, ni habían anunciado que Bogotá ya no podría ser sede para jugar fútbol; porque admiro a la persona que se declare completamente feliz en estos momentos, y sobretodo en este país.

Y si en realidad éste es el país mas feliz del mundo, ¿cuál será el menos feliz?, no quisiera imaginar como vive esa otra gente.

Tal vez vivimos felices porque después de haber oído tanto, los medios nos han ayudado a acostumbrados al olvido y por eso mucha gente hace caso omiso de todas las desgracias de los demás y se preocupa de las propias, que teóricamente, serían menos y tendrían tiempo para pensar en su felicidad.

Nuevamente, según nuestro amigo el diccionario la felicidad se define como un estado de ánimo, y estoy totalmente de acuerdo, pero es un estado de ánimo que puede irse y puede volver en cuestión de poco tiempo, y allí entra a jugar un papel importante todos los factores que hacen que la gente se sienta feliz o por lo menos piense que lo está, lo más cercano a la felicidad es la tranquilidad, pienso que si una persona no tiene de que preocuparse, tiene a su alrededor todo lo que necesita, no está intranquila, ni nada lo incomoda, es feliz. Cosa que es relativa, porque los problemas son infinitos y siempre va a ver algo, por mínimo que sea, que irrumpa con esa barrera de la felicidad absoluta que las personas tratamos de reconstruir cada día.